Es más que un libro con leyes escritas, es el resultado de un largo proceso que se inició cuando nuestra nación empezaba a gestarse, es la obra de un pueblo de luchó por sus derechos, por la libertad y la igualdad. Ahora protege a cada uno de los mexicanos.

La Constitución que hoy nos rige tiene antecedentes que datan desde la época independentista en la que se requería organizar y estructurar leyes que permitieran ordenar al país y con la Constitución de Apatzingán se promulgan leyes con ideas democráticas y liberales como base del futuro México Independiente, en las principales leyes encontramos la Abolición de la Esclavitud, la Soberanía Nacional y la Igualdad.

La primera Constitución Federal del México Independiente aparece en 1824, y en ella se señala como nombre oficial del país el de Estados Unidos Mexicanos y se divide en 19 Estados, 4 territorios y nombra a Don Guadalupe Victoria como primer presidente.

Al ser derogada la anterior, aparece la llamada Siete Leyes que reconoce al país como una República Centralista Provisional y señala un periodo presidencial con duración de 8 años.

La penúltima fue la de 1857 que rescata propuestas liberales y reconoce los derechos del hombre, separa la Iglesia del Estado, prohíbe la pena de muerte y los títulos nobiliarios, durante su vigencia ocurre la Intervención Francesa y la Guerra de Reforma.

Actualmente nos rige la promulgada el 5 de febrero de 1917 en el Teatro Iturbide en la Ciudad de Querétaro. Es una recopilación de las anteriores, toma las ideas liberales y resalta los derechos de los mexicanos y también sus obligaciones, está dividida en tres partes, la primera contiene del Artículo 1° al 70, la segunda parte del 71° al 139 y la tercera parte los Artículos Transitorios; son los Diputados y Senadores los encargados de modificarla.

Es la Revolución Mexicana el movimiento que logra consolidar nuestra Carta Magna.

 

NOEMI FUENTES GARCÍA

Prof, Licenciada en Pedagogía por la UNAM, Facultad de Filosofía y Letras