
Una problemática que enfrentan las ciudades en México es la movilidad y la seguridad vial. En nuestro país, este asunto se está atendiendo con la iniciativa de una ley que aborda la situación con el fin de tener un sustento legal en el cual fundamentar las tareas a seguir. El motivo de esta normativa son las siguientes cifras que señalan, a nivel mundial, que:
• 1.3 millones de personas mueren cada año. Se estiman más de 3 mil defunciones diarias y más de la mitad de estas no viajaban en automóvil.
• Entre 20 y 50 millones de personas sufren traumatismos no mortales, pero que constituyen una causa importante de discapacidad.
• Entre las tres causas principales de defunciones de personas de 5 a 44 años figuran los traumatismos.
Se estima que en México diariamente ingresan a unidades médicas 1,700 personas con lesiones graves ocasionadas por siniestros de tránsito y, de estas, más de 100 enfrentaran discapacidad por esta causa.
• Los traumatismos derivados por siniestros de tránsito son la primera causa de discapacidad motriz entre personas jóvenes de 17 a 24 años.
• Aproximadamente el 50% de los siniestros viales ocurre por consumo de alcohol, 30% por exceso de velocidad y 20% por el uso de distractores, como teléfonos celulares.
• Una de las consecuencias de los siniestros de tránsito que debe de llamar nuestra atención por sus efectos nocivos en la vida de las personas es la discapacidad derivada de ellos. De acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, en México existen 1 millón 462 mil 900 personas con alguna discapacidad a consecuencia de un accidente en general, sumándose a este sector anualmente 40 mil personas.

La Organización Mundial de la Salud, a través del Informe sobre la Situación Mundial de la Seguridad Vial 2018, considera, que dentro de la promulgación y aplicación de las legislaciones mundiales se deben atender los criterios para las mejores prácticas de los factores de riesgo clave, como son la velocidad, la conducción bajo los efectos del alcohol, el uso de cascos de motocicleta, el uso de cinturones de seguridad y de sistemas de retención para niñas y niños, ya que son componentes fundamentales de una estrategia integrada para prevenir las muertes y lesiones causadas por siniestros de tránsito, donde detalla las políticas que se han realizado en diversos países como los reductores de velocidad, las pruebas de alcoholemia, el uso de cascos y cinturón de seguridad, las cuales tienen como objetivo resolver esta problemática.
De acuerdo con el índice de Movilidad Urbana del Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (IMCO):
• En México las ciudades están diseñadas para los automóviles más que para las personas. Lo anterior deriva en caminos cada vez más largos para un parque vehicular cada vez mayor.
• Entre 1990 y 2017 los vehículos en circulación crecieron a una tasa anual promedio del 5.3% mientras que la población lo hizo a una tasa del 1.5%. En consecuencia, las ciudades han crecido de forma horizontal detonando barrios aislados y segregados.
• En muchas ciudades del país una gran parte de la población vive en zonas remotas, provocando que su gasto en transporte aumente. A nivel nacional, este gasto representa 19% del gasto total de los hogares, lo que equivale a un promedio de $1,815 pesos mensuales.
Esta iniciativa propone la expedición de una nueva ley, la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, así como la reforma y adición de dos leyes ya vigentes: la Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, y de la Ley de Coordinación Fiscal, misma que constará de 154 artículos divididos en seis títulos:
• Título Primero. Disposiciones generales.
• Título Segundo. Del derecho a la movilidad.
• Titulo Tercero. De los instrumentos para la movilidad y la seguridad vial.
• Título Cuarto. Del Sistema Nacional de Movilidad y Seguridad Vial.
• Título Quinto. De la concurrencia y distribución de competencias.
• Título Sexto. De la gestión de la movilidad y la seguridad vial.

Como se aprecia, si bien se trabaja en la aprobación de la ley se trata de una tarea que requiere mucho más que la promulgación de la misma, sino la conciencia general que la ciudadanía, toda, debe tener para reducir las cifras que esto acarrea.
@cgramir